Miedos
Hay días en que tengo tanto miedo
no de perderte
o de perderme
ni del mas allá o mas acá o el purgatorio
simplemente miedo
como si sacaran mi alma
y mutilaran sus alas condenándola
a un abismo inacabable y oscuro.
Miedo como si me fueran a partir el corazón en pedazos
o como si se deshiciera ante un inminente tsunami de sucesos
esperados pero crueles y desdichados.
Hay días en los que necesito tu abrazo o tus palabras
tus labios en mis manos
un examen visual a tu figura.
Hay días en los que aunque estés conmigo tengo miedo
no del futuro o de la muerte o de tu olvido,
pero si estas con migo mi miedo se enmudece,
porque tu forma de amarme me consuela
porque sólo me importa tu presencia
porque mis temerosos pasos aún sin rumbo fijo son seguros
son confiables.
Porque me haces menos miserable
porque vale la pena sentir sin importar si es miedo
amor, pasión, excitación, estupidez, cariño, esperanza o lo que sea.
Cuando estoy contigo tener miedo me hace sentir viva.